Icanclave D (clase B) con capacidad de 23 litros dispone de espacio suficiente para 3 bandejas. Es competente para trabajar con nuevos materiales como las resinas biocompatibles usadas en las impresoras 3D. En la actualidad se crean piezas médicas o utensilios sanitarios con las impresoras 3D, que después han de pasar por una autoclave esterilización. En odontología se utilizan desde tiempo atrás, como autoclave dental, pero también se están usando para crear herramientas difíciles de encontrar, caras, o en urgencias hospitalarias. Existen máquinas de sobremesa para diferentes instalaciones o de tamaños especiales: autoclave clase B de 8 litros, de 12 lts, de 18 l y de medidas especiales como la Icanclave de 29 litros, clase B.
Adquirir una u otra dependerá de las utilidades para las que se precisan, por ejemplo, como esterilizador podología, pero siempre habrá que tener presente los nuevos avances en materiales y tecnología. La autoclave laboratorio de 23 litros es idónea en un amplio rango de materiales e instrumentos. Cumple con las normativas de la Comunidad Europea EN13060, dispositivos con prevacío de tipo B. El modelo Icanclave Quality Plus dispone del software más evolucionado, impresora interna, USB y cierre especial con doble sistema de seguridad. Para un óptimo y perdurable funcionamiento, no hay que olvidarse de mantener en buen estado las piezas más susceptibles de estropearse: juntas de goma, filtro de aire o las bandejas.
Uno de los programas internos de la autoclave Icanclave es el test B&D. (Bowie-Dick) ¿Qué significa? Según EFELAB, las hojas indicadoras del test están diseñadas para monitorear diariamente autoclaves de vapor con bomba de vacío y ciclos de prevacío con el fin de detectar fugas, penetración inadecuada de vapor, burbujas de aire y/o fallas en la bomba de vacío… Brinda seguridad al operador en el monitoreo diario de la máquina. Al comprar la autoclave Icanclave clase B 23 L, es optar por lo mejor en seguridad, eficiencia y calidad.